Cuando nos sentimos mal físicamente lo común es acudir con un médico. Cuando tienes problemas estomacales buscas la forma de ir al gastro, si se te fractura una pierna acudes al ortopeda; eso me parece normal y se hace sin cuestionar nada, te sometes a tratamientos farmacológicos, haces chequeos periódicos para saber si sigues bien, pero donde vas cuando te sientes triste, depresivo.
Lamentablemente nuestra actitud hacia la salud mental no es la misma, pues se producen ideas relacionales de la psicología que limitan a la persona a asistir, una de ellas son que no es necesario, que lo emocional se cura con el tiempo, que un trago con amigos puede ser una terapia, que los psicólogos sólo son para los locos, en fin, una gran cantidad de ideas que sólo se basan en el desconocimiento de lo que realmente es una Especialista de la psicólogo.
La salud mental debe ser una prioridad en nuestra vida cotidiana, pues implica la capacidad que tenemos para sobrellevar problemas, en la toma de decisiones, en la forma en que nos relacionamos con la gente de nuestro alrededor y en cómo reaccionamos ante las situaciones cotidianas también te podemos ayudar a empoderarte frente a las circunstancias del día a día y a mejorar tu calidad de vida.
De la misma manera que no aguantas un dolor de oído y te diriges al Otorrino, de la misma manera no debes aguantas un dolor emocional.
Beneficios de ir al Psicólogo.
- Te escucha con determinación sin juzgarte.
- Te ayudamos a sentirte mejor.
- Te proporcionamos herramientas para manejo de conflictos.
- Te empoderas frente a la vida cotidiana.
- Identifica cualquier herida de la infancia y te ayuda a sanar.
- Proporciona asesoramiento profesional.
- Obtienes un punto de vista más objetivo.
- Te ayuda a identificar tus emociones.
Lic. Ana Santiago
Psicóloga clínica